Un café entre la multitud

No siempre me siento cómodo en los lugares a los que voy, y encuentro mucha gente. 

Recuerdo que la primera vez que entré a un establecimiento del McDonalds en Barcelona, lo que más me sorprendió fueron los precios. A comparación de Lima, había una gran diferencia: mientras que en Lima se va a sitios como McDonalds, Kfc, Pizza Hut; cuando se tiene un poco más de dinero (un fin de semana o fin de mes, por lo general); en Barcelona, normalmente cuando no tienes dinero. 

Ésto lo comprobé al ver que un vaso de café cuesta 1 euro. Entiendo que aquí entran las críticas como "el sabor no es el mismo"; lo cual entiendo perfectamente. Pero ello no deja de ser obstáculo para que el precio se mantenga y la gente no deje de comprarlo.

A partir de ese momento voy por mi café de 1 euro. Con mayor frecuencia me pido un cortadito.

Todo bien hasta aquí.. sin embargo, al ofrecer estos precios, mucha gente se apunta y para nadie es sorpresa la cantidad de personas que acuden en horas de desayuno y comida. Una barbaridad de gente.  

Incluso para los conciertos, restaurantes, y demás; prefiero un ambiente casi "vacío", en lo posible. Tener mucha gente al lado físicamente me genera ansiedad y una sensación de "invasión" por la cercanía con la que se interactúa. 

Sí, tampoco he ido a muchas discotecas y conciertos en mi vida por este motivo. 

Hoy en día me reclaman esta opacidad para ir a lugares muy concurridos. Sin embargo lo tolero, cual niño pequeño que espera que se le recompense. Esta recompensa normalmente me la hago a mí mismo, y terminan -casi siempre- frente a un vaso como el de la foto. 

Espero no ser el único. Déjame en los comentarios qué situación te incomoda y no logras superarla si no tienes una motivación lo suficientemente fuerte como para dejarte llevar.

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Diego Ganoza